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Muchas veces ayudamos a mi abuelo a hacer los cuadros con papel reciclado. En uno muy grande le ayudamos Guillermo pequeño, Guillermo grande, África y yo que soy Candela.



DESARROLLO-SOSTENIBLE.

ARMONIA-EQUILIBRIO.
Respeto por el planeta tierra y por la vida que se desarrolla en él. Compromiso ético de cada uno de nosotros por ese equilibrio y armonía.

RECICLAR-REUTILIZAR
Mi compromiso ético se convierte en una actitud permanente por encontrar el Equilibrio y la Armonía entre mi actividad y el entorno. Una actitud Holística. Algo como entre Panteísta y Zen. Que intenta conciliar el desarrollo material y artístico con la vida espiritual, conciencia y ser.
Desde la plástica, mi compromiso empieza por el material base para todas las obras: El papel reciclado, y no solo como soporte, sino como ingrediente principal de la obra. Todas mis obras expuestas están realizadas con este material, como elemento determinante y acabado definitivo. Al cual solo le añado algo de pigmento, arenas y otras materias recuperadas. El resultado final es un conglomerado plástico donde las texturas, el color y el contenido se armonizan de forma sugerente y natural. Pablo Rodríguez Guy. Entre Bangalore y Anantapur, India. 22-2-2008

La obra de Pablo Rodríguez Guy está hecha de tierra vivida, de luz manchada por los pasos de los días, de huellas de caminantes o de surcos que el viento y el agua han ido grabando en la piel de los sueños o, lo que es lo mismo, en el metafórico y reciclado papel lleno de escrituras ocultas. Anxeles Penas, 2003.

PABLO RODRÍGUEZ GUY
Del Arte y la Vida


El arte, la obra plástica,
es el diario íntimo del artista


Mancha y color para interpretar el mundo, la vida. Para ofrecer el propio discurso artístico. Los materiales son la compañía necesaria para hacerlo. Esencia y forma, decían los clásicos. La forma hace parte de la esencia; le da consistencia visual. En ella radica el sentido de la estética.

Papeles. Papeles reciclados. Maderas, tacos, retículas, mallas, metales, fotografías, letras y números estarcidos... Objetos casuales, encontrados, reciclados... convocados para una danza con la mancha y el color. Una danza infinita que salta hasta las retinas y se afianza en el espíritu.

En esta muestra los papeles reciclados, la gozosa pasta de papel, la mixografía cobra un protagonismo mayor. Un proceso lento de elaboración para que la amalgama del collage sea perfecto. Muchos de los grabados manipulados y retocados se convierten en obras singulares, piezas únicas. Ahí radica su valor. Grabados que constituyen verdaderos relieves, alto y bajorrelieves, sin gofrado alguno, lo que provoca un trampantojo.

En la pintura o en la mixografía -esa gruesa textura en grabados de alto relieve- se registran rojos de fuego, verdes de selva, azules de pavo real o amarillos de soles. Colores puros y mixtificados para una revelación cromática misteriosa, renovada, rítmica. Los blancos se van imponiendo a los negros en esta última etapa.

A veces se cuela la geometría en el espacio plástico: cuadrados, formas rectangulares, círculos que piden un lugar en el campo de la bella abstracción cromática, sin romper la armonía de opuestos, de contrarios. “La geometría me centra la abstracción, el caos”, confiesa el autor. Abstracción geométrica y abstracción informalista conviven en paz, en una certera integración. La obra de Pablo Rodríguez Guy es abierta, polifacética: pintura, escultura, grabado, fotografía...Nace de su interior, de la vida, del viaje interior y exterior –él es un globetrotter-, de la emoción, la experimentación, el invento. ¡Eureka! En arte no se busca, se encuentra, repetía otro Pablo artista: Picasso
.
La obra de arte se presenta de pronto. El artista es sólo un médium entre el univers y el hombre. Entre el misterio y la pieza. El espectador viene después a recrear la obra. Es un artista nuevo al mirarla, porque lo hace con sus propias referencias en la vida y en el arte. El espectador la hace suya con solo mirarla…
Julia Sáez-Angulo, De la Asociación Internacional de Críticos de Arte


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