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LA OCA DE LOS ARTISTAS
Carpeta de grabados, música y poesía.







Proyecto en beneficio de la ONG Fundación Vicente Ferrer. En el cual hemos trabajado 80 artistas desde distintas ramas del arte, (grabado, música y poesía) con un tema común: “El Juego de la Oca”. Un juego muy popular en nuestros años infantiles, simple en apariencia, pero con mucho trasfondo y misterio, con leyendas que se remontan hasta Troya y Egipto, pasan por los Templarios y los Maestros Constructores, el Camino de Santiago, Los Médicis, etc. etc.

En la mayoría de tableros del Juego de la Oca que conocemos, las casillas han sido diseñadas por un dibujante anónimo. En nuestra OCA DE LOS ARTISTAS cada casilla ha sido realizada por un artista-grabador, con su visión personal del tema y con una técnica de Obra Gráfica diversa, que va desde el grabado, litografía o serigrafía tradicional a técnicas más novedosas y actuales, fotografías e impresiones digitales. Además de las composiciones musicales y los poemas.

LA OCA DE LOS ARTISTAS se ha convertido en la excusa perfecta para reunir a un gran número de personas trabajando: pintores, grabadores, músicos, poetas; cada uno desde su campo específico, sobre un tema concreto y con la motivación especial de hacerlo para un fin social

La carpeta contiene 64 grabados originales de igual cantidad de artistas plásticos + un CD Rom de edición limitada con el título: LOS SONIDOS DE LA OCA, con creaciones musicales inéditas, creadas expresamente por 11 músicos para esta obra + seis textos de otros tantos escritores y poetas, relacionados con el tema del Juego de la Oca. Se ha realizado una edición de 110 carpetas y 10 pruebas de artista de estampas sueltas. En total 120 estampas de Numeración Única. Es una edición especial de la que una parte de las carpetas son para intercambio entre los artistas y otra se dedica a la venta, siendo los beneficios para la ONG Fundación Vicente Ferrer.

Como todo proyecto colectivo, nuestra OCA DE LOS ARTISTAS ha pasado por distintos avatares, saltos y sorpresas, atrancos y paradas, puentes, laberintos, pozos y alegrías; pero, ¿cómo podría ser de otra manera en un juego que es en sí mismo, una metáfora de la vida? Es; como la vida misma. Y como en el propio juego, hemos llegado al final y hemos entrado en el paraíso.

Desde aquí doy las gracias a todos los que han confiado en el proyecto, que han aportado su trabajo y su entusiasmo. A los artistas plásticos, a los músicos, a los escritores, a la Biblioteca Nacional, a la empresa de restauración Kalam y a todos los que han hecho que lleguemos a buen puerto. A todos gracias.
Pablo Rodríguez Guy. Otoño-2006




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